Está destinado a trabajadores y trabajadoras que desarrollan emprendimientos productivos, comerciales o de servicios de manera asociativa y/o familiar y necesitan dinero para adquirir insumos, maquinaria y/o para hacer crecer su actividad.
Los emprendedores conformaran grupos solidarios entre sí, y pueden solicitar préstamos para el desarrollo de sus actividades. Los planes de financiación son específicamente planeados para que sean convenientes a cada necesidad y con una baja tasa de interés. Es decir, que el microcrédito y los beneficiaros constituyen una red solidaria y participativa.
Desde AMTRAM se organizan actividades programadas para la capacitación y contención de los emprendedores.
El Microcrédito es mucho más que un préstamo pequeño con una baja tasa de interés. Es una oportunidad para que los emprendimientos puedan:
Organizarse y mejorar sus condiciones de trabajo junto con otros/as trabajadores/as y con las organizaciones sociales de microcrédito.
Participar de espacios de construcción colectiva, fortalecimiento y acompañamiento mutuo.
Recibir apoyo técnico y capacitación.
Compartir e intercambiar experiencias y conocimientos.
Ser parte de un proyecto colectivo que genera cambios concretos en los emprendimientos, las familias y las comunidades.